Era una noche fría de principios de Enero, posiblemente la más fría que recuerdo de este invierno 2019-2020. La verdad que la noche no invitaba a salir con la cámara pero habíamos quedado para hacer una escena nocturna con una compañera fotógrafa y modelo, y había que aprovechar la oportunidad para probar cosas distintas. El objetivo era realizar fotos en una antigua estación abandonada iluminando con velas a una joven que vagaba en camisón, sumida en una pesadilla decadente. Con esta gran idea, -5ºC y el veneno de la fotografía corriendo por las venas nos plantamos allí rozando la media noche.
Despertó en mitad de la noche, sobresaltada, desorientada. Una certeza martilleaba su mente, todo había cambiado. El frío rodeaba su cama, sábanas blancas en su recuerdo, ahora lienzos ajados y amarillentos cubrían parcialmente su cuerpo. Se incorporó y alcanzó a encender la vela fría que descansaba junto a la cama. Aferrándose al calor de la vela, sintiendo su tibieza a través del aire, consiguió reunir el valor suficiente para encaminar sus pies descalzos hacia el otro extremo de la habitación. Guiada por el rozar de madera que no paraba de increpar la calma de la noche, pudo observar la oscuridad a través de la ventana. Esa misma oscuridad, fría y negra, que había inundado el alma de….
Durante la sesión realizamos varias largas exposiciones que tenía pendientes de editar, ésta en la que ella mira temerosa la ventana me ha parecido apropiada para aportarla en la semana 18 con el tema Ventanas. En esta ocasión, por distintos motivos, me veo obligado a tirar de archivo para dar continuidad al proyecto.
Cómo realizamos la fotografía
El primer paso era colocar el escenario, que cada cosa estuviese en su sitio para poder preparar la iluminación. Para esta escena tuvimos que utilizar 4 fuentes de iluminación fija y dos linternas.
La iluminación general la logramos con 3 luces fijas cálidas para el ambiente (ventana, puerta y sala) y la propia luz de la vela. Con las linternas iluminamos a la modelo (fría) y el suelo (cálida).
Elegimos un diafragma 13 para poder conseguir estrellar la luz de la vela y subimos el ISO para reducir el tiempo de exposición. Esto era clave, el tiempo debía ser suficiente para permitirnos iluminar la escena (modelo y suelo) pero no excesivo para evitar el movimiento involuntario de la modelo. Quiero recordar que hacía un frío increíble esa noche y en esa casa, y estar 20 segundos inmóvil completamente era casi imposible. Mucho mérito de nuestra compañera tirando adelante con el plan y siendo la más valiente de los 3 👏👏
Datos EXIF de la foto
- F13.0
- 20 seg
- ISO800
- 11mm
Equipo utilizado (Enlaces a Amazon)
- Objetivo Tokina 11-20mm 2.8. Ver
- Flash Speedlite E-TTL. Ver
- Disparador remoto inalámbrico. Ver
- Trípode Aluminio Neewer 7211. Ver
- Linterna minimaglite. Ver
Como siempre, podéis consultarme cualquier duda a través de los comentarios.
¡¡Saludos y buena luz!!